La carga de aire acondicionado es una de las tareas más importantes que hay que tenemos que revisar si queremos que con la llegada de las altas temperaturas nuestro coche no se convierta en un horno con ruedas. Desde Neumáticos Tormo queremos hablaros hoy de la recarga de aire acondicionado del coche.
¿CÓMO SE CARGA EL AIRE ACONDICIONADO?
Mediante una estación de carga de aire acondicionado que se configura en función del modelo de coche ya que la carga varía en función de la cantidad de refrigerante y aceite de cada vehículo. Con esta acción se recupera el fluido refrigerante del vehículo (glas fluorado), para limpiarlo y deshidratarlo, ya que la humedad es el primer enemigo del aire acondicionado.
En resumen, los pasos a seguir serían: conectar las mangueras de alta y baja presión al circuito del vehículo; la máquina limpia y recupera el gas y el aceite viejo; al terminar se comprueba mediante vacío si existen fugas en el circuito; si no existen fugas se realiza la carga de gas y aceite.
¿CUÁNDO SE RECOMIENDA CARGA EL AIRE ACONDICIONADO?
En la medida que pasan los años y los componentes del sistema de refrigeración envejece puede que surjan fugas o microfugas que obliguen a una actuación, pero lo normal es que el fluido refrigerante no se gaste.
En el caso de un mal funcionamiento del aire acondicionado del vehículo, es importante realizar una revisión del sistema, donde descubrir si aparte de problemas en la carga existe humedad o algún elemento como el filtro deshidratante del aire acondicionado esté en mal estado.
En un clima como el nuestro el uso que se le da al aire acondicionado es intensivo, por lo que el filtro deshidratante convendría revisarlo al menos cada 5-6 años aproximadamente. La temperatura y la humedad del ambiente determinan mucho cuando sería conveniente cambiar o revisar el sistema de aire acondicionado del vehículo, por eso, en función de la zona en la que ‘trabaje’ el vehículo, el estado puede ser uno u otro.
Neumáticos Tormo recomienda recargar el aire acondicionado cada año, antes de la temporada de vacaciones de verano.
Si notas que el aire acondicionado no enfría lo suficiente, no proporciona el mismo caudal que antes o notas un olor extraño, algo no está funcionando bien en el sistema de refrigeración.